Lo que para unos es una experiencia turística completamente aventurera, para otros es una pesadilla. Los vecinos de diferentes municipios de Mallorca se han cansado de las excursiones en vehículos 4x4, conocidos como buggies, que ofrecen algunas empresas a turistas. Los habitantes de dichas localidades exigen la creación de una normativa autonómica que limite este tipo de actividad, ya que cuando se aprueba una norma municipal —como la de Manacor—, las empresas se trasladan a otro municipio.

“Hacen mucho ruido, levantan mucha polvareda porque transcurren por caminos de tierra, además aceleran, se paran y vuelven a acelerar. Es un verdadero desastre. Destrozan el camino y además causan atascos”, ha explicado a Diario de Mallorca Mireia Oliver, de Can Majoral en Algadia, una localidad hacia el interior de Mallorca.

Por otro lado, además de generar molestias a los vecinos, también suponen un obstáculo para los trabajadores de la vendimia. “Tras el atasco [de vehículos], cuando reprenden la marcha, lo hacen a toda velocidad, levantando una gran polvareda. El jueves mismo estábamos trabajando en la viña y nos dejaron todos blancos. Durante la vendimia, ha sido complicado convivir con este tipo de excursiones”, ha relatado Oliver.

Por el momento, vecinos de las localidades de Algaida, Felanitx o Portocolom ya han presentado las correspondientes denuncias en sus respectivos Ayuntamientos. Por su parte, según ha podido saber el diario citado anteriormente, tanto el Ayuntamiento de Algaida como el de Felanitx se encuentran trabajando en normas que regulen la actividad de estas empresas.