Palma (Mallorca) celebrará en enero de 2019 una cumbre internacional contra el turismo incívico y de borrachera, que degrada la imagen de destinos turísticos españoles, como Magaluf en Mallorca o Sant Antoni de Pormany en Ibiza, además de atraer a un turismo de baja calidad, que acostumbra a comportarse sin modales.

Según ha informado El Mundo, aún no existe una fecha y emplazamiento concreto para celebrar el evento, aunque se cree que tendrá lugar después de la Feria de Turismo de Madrid (Fitur) y se baraja el Palacio de Congresos como escenario. El objetivo de la cita consiste en debatir y desarrollar diferentes estrategias para controlar este tipo de turismo.

A su vez, ya está confirmada la participación del Ejecutivo central. Tal es así, que la secretaria de Estado de Turismo, Bel Oliver, podría inaugurar el acto. En caso de que no pudiera por cuestiones de agenda, se ha optado por el director de Turespaña, Héctor Gómez. La Conselleria de Turismo balear apoyará esta iniciativa con su titular, Bel Busquets, a la cabeza, mientras las principales asociaciones de viajes británica y alemana, ABTA y DRV, respectivamente, ya han confirmado su asistencia.

En Magaluf, por ejemplo, uno de los destinos más demandados por el turismo de borrachera, ha descendido el número de turistas expulsados por mal comportamiento de los hoteles, durante este año. Sin embargo, han aumentado los casos de balconing, una fatal realidad que impulsa al sector a luchar contra este tipo de turismo.

West Ent en Sant Antoni (Ibiza) | Foto: ibiza5sentidos.es

En el archipiélago balear, a su vez, existe otro destino que ha sufrido los estragos del turismo de borrachera. Se trata de West End, en el casco urbano de Sant Antoni, la que era la “mejor zona de ocio de la isla”, tal y como la describió el presidente de la Asociación de Alojamientos Turísticos de la Pimeef, Antoni Ramon. Un destino que, asegura, no recomienda a sus clientes.

Así lo manifestó, según ha apuntado Diario de Ibiza, durante un coloquio sobre el modelo turístico de Sant Antoni, coorganizado por el Ayuntamiento de la localidad y Diario de Ibiza, con el que se discutió la solución para devolver el brillo a Sant Antoni y recuperar a los vecinos, ya que se ha producido una fuga de residentes locales por el turismo de descontrol, y con ellos la convivencia.

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