La crisis del coronavirus no ha tenido el mismo impacto en los diferentes países de la Unión Europea. Algunos de los más afectados han sido Italia y España, dos destinos turísticos del Mediterráneo por excelencia.
Ante este escenario, Bruselas teme que los países donde el virus ha tenido menos incidencia arrinconen, en materia turística, a aquellos que más han sufrido sus efectos. Todo ello, pese a la predisposición de los estados miembro de estar todos a una: "O salimos todos o ninguno".
Según ha informado El Mundo, desde la Comisión Europea temen que algunas capitales dificulten los planes de viaje de sus ciudadanos a las zonas más afectadas, no explícitamente sino a través del endurecimiento de medidas de control o limitando los vuelos. Por ejemplo, dictando la cuarentena obligatoria para los turistas que regresen de Baleares o Canarias.
A este respecto, la vicepresidenta de la CE, Vera Jourova, puso de relieve: "Algunas áreas turísticas en Europa sufrirán un impacto mayor que otras, con una situación particularmente difícil en el sur de Europa". "No debería haber selección de quién entra o no según su nacionalidad", agregó.
Alianzas entre países
Incluso, algunos países estarían estudiando conformar una alianza para crear una zona de turismo permitida. Es el caso de Austria, Australia, Dinamarca, Grecia, Israel, Nueva Zelanda y República Checa, que han acordado mantener reuniones periódicas para tratar esta cuestión.
No sería la única, ya que Eslovaquia, República Checa, Hungría y Croacia también podrían estar trabajando en una iniciativa similar. El canciller de Austria, Sebastian Kurz, al mismo tiempo, busca establecer una alianza parecida con Alemania, país vecino, y Croacia.
Una opción menos discriminatoria
De acuerdo con el diario mentado, que cita fuentes diplomáticas, también se estudia la opción de crear zonas turísticas por territorios y no por países, ya que hay "zonas del sur de Italia que tienen menos contagios que Austria". Otras voces comunitarias, sin embargo, consideran que esta posibilidad es más difícil de implantar.
Por el momento, nueve países de la UE, entre los que se encuentran Francia, España o Italia, han solicitado a la UE "un plan de recuperación europeo para la industria turística, que incluya medidas coordinadas y específicas a corto y medio plazo, con el fin de apoyar al sector". Bajo esta iniciativa, reclaman medidas especiales para determinados territorios, como son las regiones ultraperiféricas o islas.