Más allá de la moratoria hotelera vigente en Barcelona, una nueva medida municipal va a afectar directamente a la industria alojativa: la revisión catastral, por el que la administración local otorgará un nuevo valor a los bienes inmuebles en base al que se determinarán los impuestos a pagar.
Y es que la revisión del valor de las propiedades que realizará la Ciudad Condal a partir del 1 de enero de 2018 tendrá mayor impacto en los hoteles de tres o más estrellas que en el comercio, la industria, las oficinas o incluso los particulares.
El principal motivo reside en el peso que se le otorga a cada uno de los valores que componen el valor catastral. Aunque la parte que corresponde a la construcción se reduce, la parte del suelo aumenta de forma significativa. Este cambio no afectará tanto al pago del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) sino a la conocida como Plusvalía que grava el valor catastral del suelo en caso de venta. Así, puede ser que se frene la compraventa de hoteles en Barcelona debido a la alta carga impositiva que se prevé.
Según las simulaciones de la consultora Ayming, el valor de un hotel de cinco estrellas en el Barrio Gótico aumentará de los 1.753.069,62 euros a los 2.567.342,16. La parte correspondiente a la construcción bajaría (de 1,3 a 1,1 millones), sin embargo, el suelo pasa de tener un valor de 404.831 euros a los 1,4 millones. Lo mismo ocurre en Diagonal Mar con aumentos de los 3,2 a los 7,7 millones.
Actualmente, existen en la ciudad 307 hoteles de tres o más estrellas que se verán afectados por esta revisión, que también tendrá en cuenta por primera vez la realización de una valoración específica para las viviendas turísticas en inmuebles residenciales.