El Ayuntamiento de Palma (Mallorca) instalará dispositivos que hacen que las farolas parpadeen cuando detectan un exceso de ruido.
Según informa Última Hora, en un principio se implantarán cuatro de estos chivatos en el alumbrado de la Plaça Drassana. Los dispositivos miden el ruido en el ambiente y provocan que parpadeen las luces para alertar a las personas que bajen la voz o la música.
La prueba piloto comenzará a ejecutarse en esta plaza del centro de Palma en uno o dos meses. Y es que esta zona es un punto de reunión muy popular durante los fines de semana.
Rodrigo Romero, concejal de infraestructuras, ha explicado que el objetivo es ayudar a compatibilizar el ocio nocturno y el descanso de los vecinos. Los sensores, valorados en 13.136 euros, podrán ser programados para funcionar durante determinadas horas, coincidiendo con la apertura con los locales de ocio.
Los cuatro dispositivos de variación del nivel de iluminación en la plaça Drassanes para el control del nivel del ruido están valorados en 13.136 euros.
El sistema ya está implantado en otras localidades españolas como Sant Cugat del Vallès (Barcelona).
Reducir las molestias a los vecinos
Esta medida forma parte del plan del Ayuntamiento de Palma de reducir las molestias a los residentes. Se suma a la nueva Ordenanza Reguladora del Uso Cívico de los Espacios Públicos (Orucep), que entró en vigor el 1 de abril y que sancionará con multas de entre 2.200 y 3.000 euros a quienes consuman alcohol fuera de las zonas delimitadas y prohíbe la publicidad de consumo de alcohol fuera de los locales.
