Los cruceros volverán al puerto de Palma (Mallorca) en julio, aunque la afluencia regular de estas embarcaciones no llegará hasta agosto. En concreto, la instalación portuaria recibirá 249 embarcaciones de este tipo entre agosto y diciembre de 2020, solo 31 menos que en el mismo período de 2019, pese a la situación de pandemia. 

Según ha informado Diario de Mallorca, el próximo 10 de julio arribará el primer crucero al puerto de Palma, tras el parón de esta actividad por la crisis del COVID-19. Se trata del MSC Seaview, propiedad de MSC Cruceros, de 323 metros de eslora y capacidad para más de 5.000 personas. Para ese mes están previstas siete escalas, especialmente para la segunda quincena, aunque estos datos podrían variar, debido a que las navieras todavía están ajustando sus horarios.  

A partir de agosto, el tráfico de cruceros se normalizará a los niveles previos a la pandemia. Incluso, en las jornadas del 22 de agosto y del 19 de septiembre coincidirán cinco cruceros en el puerto. Otros muchos días, de acuerdo con el diario citado, permanecerán atracados entre tres y cuatro cruceros de forma simultánea en el puerto de Palma. 

El caso de noviembre y diciembre

Llama la atención que en los dos últimos meses de 2020 se registran más reservas que en los del año anterior: 37 frente a 34 en noviembre y 18 frente a 16 en diciembre. Por el momento, las líneas de cruceros que preparan su programación con un año de antelación han solicitado 510 puestos de atraque a la Autoridad Portuaria, para el año 2021. En 2019, se solicitaron 592.

"Peligro potencial" para la ciudad

La Plataforma contra los megacruceros ha alertado del "peligro potencial" que suponen estas embarcaciones para la ciudad de Palma, debido a que los cruceros "hacen que un posible positivo por coronavirus sea difícilmente trazable y aislable". Y es que, estas ciudades flotantes "conectan diferentes ciudades en solo unas horas". Por ello, han exigido a las autoridades que publiquen las medidas de precaución a seguir en las instalaciones portuarias, como los controles de pasajeros que quieran desembarcar. 

Cabe destacar que las líneas de cruceros están trabajando en protocolos de seguridad e higiene para extremar la precaución a bordo y reducir al mínimo el riesgo de contagios. Norwegian Cruise Line, por ejemplo, ha hecho públicas las medidas que tomará, entre las que figura la medición de la temperatura a tripulantes y pasajeros antes de acceder al barco, en cada escala o antes de acceder a los restaurantes. 

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