La isla de Ibiza se encuentra actualmente en el máximo nivel de alerta sanitaria por el impacto del Covid-19 (el nivel 4 “reforzado”). La situación actual ha llevado a las patronales del sector del Turismo, la Hostelería y el Ocio a dar por perdida cualquier posibilidad de tener actividad durante la Semana Santa (arranca el 28 de marzo), así emplazan el reinicio de las operaciones al mes de junio.
Ana Gordillo, presidenta de la Federación Hotelera de Ibiza y Formentera (Fehif) explica que los hoteleros intentarán abrir antes, pero que la fecha de apertura fijada en el calendario es el mes de junio. “Hay que ser realistas. Marzo o abril sería lo ideal, pero no se dan los requisitos dada la situación de la pandemia y la constante incertidumbre”, ha declarado a Diario de Ibiza.
“No habrá Semana Santa turística”, sentencia Alfonso Rojo, presidente de la Petita i Mitjana Empresa pitiusa (Pimeef). Abre la posibilidad de que lleguen algunos extranjeros que cuentan con una segunda residencia en la isla siempre que se levanten ciertas restricciones tanto en origen como en destino, pero descarta totalmente que puedan llegar flujos turísticos.
El vicepresidente de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears (CAEB), José Antonio Roselló, resalta las dificultades tanto del destino como de los países emisores para bajar a los niveles de contagios considerados como tolerables (25 casos por 100.000 habitantes supone estar en semáforo verde), llama por tanto a “seguir luchando y nunca viajar la guardia” y llama a acelerar el proceso de vacunación, sobre todo, en regiones que dependen del turismo para granjearse “la imagen de destino seguro”.
“Lo que no puede ser es que entre y salga en la isla todo el mundo sin una PCR. Hay que limitar los accesos”, añade Verónica Juan, presidenta de la asociación de la restauración de Pimeef.
Todos ellos, además coinciden en que es clave la prórroga de los ERTE y la concesión de ayudas directas y “consistentes” a las empresas de los sectores que más duramente se han visto afectados por la pandemia. También recalcan la necesidad de exoneraciones de impuestos municipales, bonificaciones en las cuotas de la Seguridad Social o rebajas en el IRPF.