El pasado jueves 22 de agosto entró en vigor la modificación de la Ordenanza de Movilidad del Ayuntamiento de Benidorm (Alicante) con la se pretende regular la utilización de patinetes eléctricos, segways, scooters y otros dispositivos de movilidad.
En el diario Alicante Plaza, José Ramón González de Zárate, concejal del área, insistió en que la regulación obliga a los usuarios a “ir con casco y a tener un seguro de responsabilidad civil”. Los vehículos de movilidad personal también tendrán que portar de forma obligatoria “elementos reflectantes, luces y timbres homologados”.
Asimismo, la regulación impide que los vehículos circulen “por las aceras y las calles peatonales”. Además, prohíbe que circulen sobre los carriles-bici de las aceras, aunque permite que lo hagan por los de la calzada. Sí que permite su paso por parques, aunque deberán hacerlo a la velocidad de peatón.
Las sanciones contempladas en caso de incumplimiento oscilan entre los 80 y los 500 euros, dependiendo de la gravedad de la infracción, aunque se dará inicialmente un margen a los usuarios para adaptarse a las nuevas exigencias.
Eso sí, serán tajantes con las empresas que ofrecen este tipo de servicios. Las compañías que alquilan este tipo de vehículos tienen unos requisitos adicionales, ya que “deberán proceder al registro e identificación de los mismos por vía telemática ante el Ayuntamiento”. Además de cumplimentar un formulario deberán adjuntar una ficha con las características técnicas y homologación de cada vehículo o ciclo y el seguro de responsabilidad civil de todos ellos.
Una vez completado el proceso, reciben un código identificativo QR que tendrán que llevar todos los vehículos. Este distintivo “permitirá a la Policía Local tener acceso a todos los datos y documentación del vehículo”.