Los usuarios de las plataformas Airbnb y HomeAway han contraatacado a la campaña de denuncias de pisos turísticos ilegales promovida por el Ayuntamiento de Barcelona. La asociación de anfitriones, Veins i Anfitrions, ha iniciado una operación de buzoneo para contrarrestar la iniciativa municipal por considerar que “incita peligrosamente a la marginación social y contribuye a un ambiente de sospecha propio de tiempos pasados”. El colectivo alega que alquilar una o dos habitaciones, el máximo establecido por su código de conducta, les permite “seguir pagando el alquiler o hipoteca y evitar desahucios teniendo en cuenta la crisis de nuestros días”. La acción del lunes, coordinada con la etiqueta en Twitter #noAlesDenunciesEntreVeins (No a las denuncias entre vecinos), se sumará otra iniciativa el miércoles. La asociación presentará alegaciones al proyectode regulación de turismo de Cataluña que prepara la Generalitat