El Ayuntamiento de Valencia ha iniciado los primeros contactos con las plataformas de alojamientos (P2P), con el objetivo de regular la actividad en este sector. Para ello, creará una comisión municipal destinada a los debates sobre la tasa turística y pide a la Generalitat que deje decidir a los consistorios.
La alcaldía se propone alcanzar un acuerdo que limite el arrendamiento de las viviendas a 60 días al año. Mientras tanto, la Generalitat arranca el proceso para implementar una tasa turística autonómica.
La primera teniente de alcalde y concejala de Turismo, Sandra Gómez, explicó que esta limitación en el número de días en que los pisos pueden estar ocupados por visitantes, tiene como propósito fijar un lapso que encajaría con los principios de economía colaborativa, ya que supera con creces el período vacacional en el que los residentes habituales podrían dejar libre su vivienda y ponerla en el mercado turístico.
Esta mediada busca frenar la adquisición de pisos en la ciudad para un fin exclusivamente turístico que deja de lado el concepto de residencia habitual. Los contactos con las plataformas P2P ya se han iniciado y el ayuntamiento confía en que se pueda llegar a un acuerdo para regular la situación de los pisos turísticos en la capital de la comunidad valenciana.
La concejala de Turismo se sentó también con representantes del sector en la ciudad, para debatir sobre la tasa autonómica. Gómez reivindicó, como hizo el alcalde, Joan Ribó, que este tipo de impuesto no sea uniforme, sino que se deje en manos de los ayuntamientos la manera de articularlo.
La edil argumentó que mientras Cataluña o Baleares disponen de un porcentaje de turistas extranjeros muy elevado, la fortaleza de la Comunidad se encuentra en el turismo nacional, por lo que la tasa podría no funcionar igual. Por esa razón, Valencia creará una comisión municipal con todo el sector para analizar cómo se debe aplicar en la capital autonómica.
