El Ayuntamiento de Valencia quiere cortar por lo sano y eliminar cualquier posibilidad de alquiler turístico en el distrito de Ciutat Vella, que abarca los barrios céntricos de La Seu, La Xerea, el Mercat y El Carme.

Tras el último varapalo judicial recibido en su enfrentamiento con las asociaciones de alquiler vacacional, el consistorio de la capital del Turia ha tomado la determinación de cerrar la única puerta que había dejado abierta. “Vamos a eliminar esta posibilidad desde el Ayuntamiento. No va a haber vivienda turística ocasional en Ciutat Vella”, ha asegurado Borja Sanjuán, concejal de Hacienda en Valencia en declaraciones recogidas por Valencia Plaza.

Cronología de la polémica


Así, han iniciado los trámites para modificar su Plan Especial de Protección (PEP) de Ciutat Vella, que entró en vigor el pasado 2020 y que prohibía la apertura de nuevos establecimientos hoteleros (hoteles, hostales y pensiones) y pisos turísticos “profesionales”, es decir, aquellos ofertados todo el año y ubicados en un bloque de edificios dedicado al alojamiento turístico en su totalidad.

El plan sí que dejó la posibilidad de que los vecinos pudiesen ofertar su vivienda en plataformas de economía colaborativa como Airbnb, por lo que creó la figura de pisos turísticos “ocasionales”: aquellos que se alquilaban por un período inferior a 60 días. Eso sí, los propietarios debían ser particulares, estar empadronados en dicho piso, contar con el permiso del resto de propietarios del edificio. No obstante, esta posibilidad entraría en vigor una vez se aprobase  "la correspondiente ordenanza reguladora" —algo que aún no ha ocurrido—.

Este impasse llevó a la Asociación de Viviendas de Alquiler para Estancias Cortas (AVAEC) a denunciar el PEP ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) que, en sentencia, determinó que los pisos de alquiler turístico “ocasional” no tenían que esperar a la ordenanza reguladora y, además, anuló los requisitos exigidos, anteriormente citados.

Desde el Ayuntamiento consideran que dicho fallo judicial abre de nuevo la puerta a que las empresas exploten pisos turísticos “ocasionales” y han optado por una decisión tajante: prohibir cualquier tipo de modalidad para que “no se puedan colar apartamentos turísticos” que reduzcan la oferta residencial para los vecinos del distrito.