Las grandes ciudades españolas siguen buscando la fórmula para garantizar la convivencia entre vecinos y un número de turistas que no deja de crecer. En esas estrategias, la mayoría están optando por implementar límites o moratorias sobre la construcción de nuevos hoteles.

Así lo han hecho ya urbes como Barcelona y Palma donde mediante legislaciones locales se ha decidido frenar la proliferación de nuevos establecimientos hoteleros. Ahora a ellas se suma Valencia,  que en su Plan Especial de Protección de Ciutat Vella contempla restricciones a nuevas infraestructuras turísticas en algunos de los barrios del centro histórico de la ciudad.

Así, según recoge el diario ‘El Mundo’, el consistorio considera que los barrios de el Mercat, El Carme, La Seu y La Xerea han alcanzado su punto de saturación, por lo que no podrán incorporar nuevas plazas hoteleras, no así el de Sant Francesc, donde se sitúa el Ayuntamiento, que aún tiene capacidad.

El ámbito de aplicación del conocido como PEP de Ciutat Vella también afectará tanto a los citados barrios junto al de El Pilar, que se encuentran en el interior del trazado de la muralla bajo medieval, como a otras áreas extramuros adyacentes como el tramo del antiguo cauce del río Turia que va desde el puente de las Artes hasta el puente de la Exposición, edificaciones de la embocadura de la calle Quart extramuros, las parcelas que conforman el entorno de protección de la Plaza de Toros y la Estación del Norte con las parcelas de las edificaciones que conforman su entorno.

No obstante, esta medida no afectará a las licencias ya solicitadas o en proceso de trámite. Según defienden desde el consistorio de la Capital del Turia,  para evitar problemas administrativos. Además, también contempla excepciones entre las que se incluyen los permisos para uso como hoteles boutique de los edificios emblemáticos rehabilitados

Desde el Ayuntamiento insiste en que el objetivo no es prohibir la creación de cualquier hotel, sino poner límites para evitar el fenómeno de la gentrificación y evitar que todos los edificios de nueva creación sean destinados a la actividad turística.