El Gobierno de las Islas Baleares aprobó el viernes 17 de enero el decreto ley con el que pretende dar carpetazo al turismo de borrachera. Se trata de una de las medidas estrella del archipiélago, que presentó ayer, 22 de enero, en el arranque de FITUR.
Precisamente, tal y como informa Europa Press, la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, puso de relieve la "valentía" del Govern, por haber aprobado esta normativa y plantar cara al turismo de excesos, en su visita al stand de Baleares.
La ministra respondió así a la presentación del real decreto realizada por la presidenta de Baleares, Francina Armengol. Sin embargo, no todo son halagos hacia esta medida. La Asociación Británica de Agencias de Viajes (ABTA), por ejemplo, considera que la norma puede afectar a la llegada de turistas a las islas.
Según reseña TTG, un portavoz de la asociación, recordó que las Islas Baleares y concretamente los destinos de Magaluf, Playa de Palma (Mallorca) y Sant Antoni (Ibiza), donde se centra la normativa, son "muy populares entre los turistas británicos". Al mismo tiempo, indicó que la ABTA apoya "las iniciativas que mejoran la salud y la seguridad de los veraneantes", pero cree que aquellas relativas al 'todo incluido' "están mal dirigidas".
Cabe destacar que la norma limita las bebidas alcohólicas a seis por día en los 'todo incluido', así como prohíbe la publicidad que incita a beber alcohol, como son las barras libres, happy hours o 2x1. También, la venta de bebidas espirituosas en los locales, entre las 21.30 y las 8.00 horas, entre otras.
Desde la ABTA consideran que la "gran mayoría de los veraneantes de los 'todo incluido' son parejas y familias", por lo que les cuesta entender cómo esta norma solucionará el problema de los "comportamientos antisociales en los centros turísticos". "Animamos a las autoridades baleares a reconsiderar esto", sentenció.