Los alemanes se resisten al mobile payment, es decir, al pago de servicios mediante el dispositivo móvil, siendo fieles al pago en efectivo para todo tipo de transacciones.
Según informa el diario Horizont, la penetración del pago mediante aplicaciones como Google Pay y Apple Pay en Alemania es inferior a la del resto de países de Europa Occidental, situándose al mismo nivel que naciones en vías de desarrollo como Albania, Bielorrusia o Kosovo.
Por el contrario, Italia lidera el uso de los dispositivos móviles para pagar, seguida por Reino Unido, España y Francia.
Un estudio elaborado por la firma estadounidense E-Marketer determina que sólo 5,8 millones de alemanes prefieren usar su móvil para pagar en establecimientos físicos. Esto supone que sólo un 11% de los usuarios de teléfonos inteligentes usan su dispositivo de este modo.
Entre los principales motivos por los que los teutones se resisten a las nuevas tecnologías se encuentran el hecho de que ninguno de los grandes operadores que ofrecen estos servicios estaban activos en Alemania hasta el pasado año. De hecho, con la llegada de Google Pay y Apple Pay y el lanzamiento de servicios propios de Mastercard y los bancos Volksbanks y Raiffeisenbanks, muchos especialistas en comercio indican que la tendencia está cambiando ya que el uso de m-wallet ha crecido en Alemania un 36,6% con respecto a 2017.
Se espera que para 2019 cerca de 6,9 millones de alemanes paguen con sus móviles; para 2020, 8,1 millones; para 2021, 9,4; y para 2022, más de 10 millones.
