El balneario turístico de Riccione (en la región italiana de Emilia-Romaña) está trabajando en la reapertura de sus playas, una acción que se espera para mediados de junio. De hecho, el primer ministro italiano, Giuseppe Conte, anunció que, a partir del 4 de mayo, tendrá comienzo un programa nacional de reapertura del que se ofrecerán más detalles a lo largo de la semana. 

Según ha informado Tourexpi, ante este proceso de desescalada, Riccione planea que solo un número limitado de personas pueda acceder a las playas, por lo que los bañistas deberán reservar previamente su visita a los arenales. Así lo manifestó la alcaldesa del municipio, Renata Tosi. 

En este sentido, Tosi enfatizó que este verano tendrán lugar unas vacaciones diferentes a las habituales, ya que hay que "mostrar sentido de la responsabilidad". Esta situación, por tanto, dejará una postal atípica en las playas de Riccione, con menos usuarios y sombrillas que de costumbre. 

Proceso de desescalada

Conte ha adelantado alguna de las medidas que recoge el programa de reapertura, que tendrá en cuenta "las peculiaridades territoriales". Tal y como reseña El Mundo, el uso de mascarillas y el distanciamiento social seguirán siendo imperativos hasta la aparición de una vacuna o tratamiento efectivo. También, se reforzarán los servicios de prevención para evitar focos en residencias de ancianos; se determinarán estructuras para tratar exclusivamente a pacientes con COVID-19 y así evitar contagios entre el personal sanitario y enfermos; y se desarrollará un plan de investigación epidemiológica basado en pruebas serológicas. Por último, los ciudadanos podrán descargarse una aplicación de seguimiento inmune de forma voluntaria. 

El primer ministro italiano también ha anunciado un plan de ayudas para empresas y familias de 50.000 millones de euros, que se sumarán al de 25.000 mill. ya asignado.

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