La policía de Malasia está interrogando al operador de un campamento sin licencia como parte de la investigación de las muertes de 24 personas a causa de una avalancha. El camping se encontraba a unos 15 kilómetros del popular destino turístico Genting Highlands y a menos de 50 kilómetros de la capital malaya, Kuala Lumpur.
La búsqueda de las víctimas, incluidos siete niños, ha continuado durante este domingo. De las 94 personas que se alojaban en el campamento, 61 han sido encontradas con vida, por lo que nueve se encuentran aún desaparecidas. La policía y los bomberos han reforzado los equipos de búsqueda por si hubiera algún superviviente más atrapado en el lodo.
La mayor parte de las víctimas eran turistas internacionales y locales, que se hospedaban en el camping Father’s Organic Farm, que ofrece, además, una experiencia en una granja orgánica. El propietario del campamento posee dos más como este. Según ha informado el ministro de Desarrollo del gobierno local, Nga Kor Ming, se ha ordenado el cierre de estos al considerarlos de “alto riesgo”.
Una investigación preliminar, a la que ha tenido acceso la agencia Reuters, indica que se han derrumbado alrededor de 450.000 metros cúbicos de tierra, que cayó desde una altura estimada de 30 metros y cubrió un área de alrededor 0,4 hectáreas. Cabe recordar que en los últimos días se han producido varios monzones en la zona, que han podido provocar corrimientos de terreno.