Una pareja de españoles, residente en la localidad de Pontecesures (Pontevedra), se encuentra entre los fallecidos tras los fatales atentados perpetrados el pasado domingo, 21 de abril, en Sri Lanka. El número de víctimas mortales ha ascendido hasta 320, mientras que los heridos se cifran en 500.

Según ha informado El País, los españoles son Alberto Chaves Gómez, de 31 años, y su pareja, María González, de 32. Ambos estaban alojados en el hotel Kigsbury (Colombo) disfrutando de unas vacaciones, cuando fueron alcanzados por una de las explosiones que asolaron Sri Lanka el pasado domingo. 

Chaves, natural del municipio coruñés de Rianxo, trabajaba en la India, en la filial de la multinacional Profand, con sede en Vigo, dedicada a la pesca y procesado de productos congelados. González, por su parte, trabajaba en Vestuarios Mayper, una empresa de confección de ropa de trabajo. Se había desplazado hasta Sri Lanka para pasar unos días con su novio.

El alcalde de Pontecesures, Juan Manuel Vidal, fue el encargado de anunciar el fallecimiento de los jóvenes, cuyos cuerpos pudieron ser identificados gracias a los tatuajes. El Ayuntamiento se ha prestado a colaborar con las familias de los fallecidos para que la repatriación de los cadáveres se produzca lo más pronto posible.   

De acuerdo con la agencia de noticias Al Jazeera, entre las víctimas mortales de esta serie de atentados se encuentran 38 ciudadanos extranjeros, procedentes de los siguientes países: Reino Unido, India, Australia, Estados Unidos, Japón, Dinamarca, Portugal, España, China, Holanda y Turquía.  

Terrible pérdida para el dueño de Asos

En Dinamarca, el suceso ha tenido especial conmoción, ya que el hombre más rico del país, Anders Holch Povlsen (46), principal accionista del portal de moda Asos y propietario de la firma Bestseller, perdió a tres de sus cuatro hijos en los ataques. No se ha informado sobre las edades de los niños ni sobre el hermano que sobrevivió, por deseo de sus padres. En este sentido, el jefe de comunicación de la marca Bestseller pidió respeto al dolor y la privacidad de la familia.

Lo cierto, es que numerosos turistas se trasladaron hasta Sri Lanka para disfrutar de las vacaciones de Pascua. Los atentados se perpetraron contra tres hoteles de lujo – el Shangri-La, el Cinnamon Grand y el Kingbury, todos ubicados en Colombo- y contra tres iglesias. También se produjo una explosión en las proximidades de un cuarto hotel y en una zona residencial. A posteriori, se detectó una bomba en los aledaños del Aeropuerto Bandaranaike. Por el momento hay siete detenidos.

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