El crimen ha vuelto a teñir de sangre un destino turístico de México, en este caso, en la costa del Pacífico. Se trata de Ensenada (en el estado de Baja California), uno de los destinos estrella para surfistas de todo el mundo, y donde recientemente se ha hallado en el fondo de un pozo tres cuerpos sin vida pertenecientes a tres turistas extranjeros: los hermanos australianos Callum y Jake Robinson y su amigo estadounidense Jack Carter Rhoad.
Los tres amigos se disponían a hacer el viaje de sus vidas: querían viajar por carretera, acampando y practicando surf, desde una zona al sur de Ensenada hacia las Playas de Rosarito, más al norte. No obstante, el día 27 de abril, sus familiares dejaron de tener noticias de los surferos y sus teléfonos habían perdido la señal, por lo que la Fiscalía del estado comenzó una investigación. Finalmente, tras una semana de búsqueda, los cuerpos han sido encontrados en un pozo de 15 metros de profundidad y su camioneta incendiada.
Al parecer, según ha podido recrear la Fiscalía, los tres surfistas fueron víctimas de un intento de robo. El objetivo: la camioneta en la que viajaban, para posteriormente sustraer las llantas de las rudas. “Los agresores sacan un arma que tenían en su poder y privan de la vida al que de inicio se opuso al robo y posteriormente se les echan encima a los otros dos”, ha explicado la fiscal estatal María Elena Andrade. “Todos presentan un orificio producido por proyectil de arma de fuego en la cabeza”, ha añadido.
Asimismo, la Fiscalía ha querido dejar claro que la participación de carteles de la droga u otro tipo de bandas organizadas no formaba parte de la teoría principal de investigación, no se ha descartado nada aún. “Hay mucha información importante que no podemos hacer pública”, ha afirmado Andrade en declaraciones recogidas por La Razón. No obstante, ya ha habido tres detenidos y con el tiempo se irán desvelando más detalles del crimen.
