Un pequeño resort en la isla de Siargao, en Filipinas, ‘Patrick´s on the Beach', ha causado polémica en las redes sociales por fomentar el turismo sexual entre los occidentales, según ha publicado ‘RTVE’.
En su página web, el establecimiento contaba con la sección ‘Romance al estilo filipino’, que ya ha sido borrada, donde incluían el siguiente mensaje: “Nuestro cliente de mayor edad tenía 75 años encontró a su dulce amor de 21 años en la isla de Siargao”. También vendían que las filipinas “prefieren chicos mayores y maduros” y “cuanto más blancos mejor” porque “la piel oscura se asocia a la clase baja”. Estos no eran los únicos llamamientos controvertidos. "No importa si usted es viejo o gordo como la mitad de la población occidental. Las mujeres aquí respetan mucho la edad y a veces el peso es un plus", aseguraban, insistiendo en que las féminas locales "tienen un gran problema de inseguridad por sus narices chatas y por eso les gustan los extranjeros con una nariz larga".
El dueño del resort es un alemán, Andreas Mikoleiczic, que ha lamentado las críticas desatadas contra un contenido que, según afirma, fue publicado en 2004. Por el momento, las autoridades locales han abierto una investigación que podría acabar con la deportación de Mikoleiczic, que lleva 15 años asentado en la región.
Paulo Fuller, director de la fundación Renew, que ayuda a las víctimas de tráfico de personas, ha explicado que "la pobreza endémica, el desempleo, la indulgencia al aplicar las leyes y el crecimiento de la industria del turismo sexual han contribuido a los altos niveles de prostitución en el país".
Por ello, asegura que "los turistas sexuales de otros países de Asia, EEUU, Australia o Europa están acudiendo en masa a Filipinas, donde pueden explotar a las jóvenes económicamente vulnerables para tener sexo".