El Ayuntamiento de Madrid ha presentado el primer borrador del Plan de Calidad del Aire y Cambio Climático, que se prevé que será aprobado a principios de 2017 y podría entrar a funcionar en los primeros meses de 2018, para reducir el número de automóviles que transita por la capital. Entre las medidas que recoge se encuentran: convertir en área de prioridad residencial el centro de la ciudad, reducir los carriles orientados al transporte privado y limitar la velocidad en la M-30 a 70 km/h. Según Inés Sabanés, concejal de Medio Ambiente, ha declarado que: "Se trata de un requerimiento que la Unión Europea ha hecho a Madrid por superar sistemáticamente los límites [de contaminación] permitidos y exponer la salud de los ciudadanos”. Además, también se eliminaría la zona azul de aparcamiento para no residentes y se sustituirían por verdes, exclusivas para vecinos, creando así un aforo limitado al centro, aunque se recogen excepciones para vehículos menos contaminantes. Asimismo, el Ayuntamiento también quiere rediseñar principales vías de distribución del tráfico, así como las vías de conexión de los distritos de la periferia con el centro” para reducir el espacio dedicado al vehículo privado a favor de otros medios de transportes (bicis, autobuses...), lo que contribuiría a redistribuir el tráfico por vías paralelas a las calles más transitadas. A estas propuestas se le suman varias decenas que serán sometidas a un trámite de información pública para lograr “plan consensuado y participado”. Estos últimos días, el tráfico en Madrid ha tenido cierto protagonismo después de que se tuviera que limitar el acceso al centro debido a la alta polución concentrada en la ciudad. Enlaces relacionados: 08/10/2016 Madrid planea cerrar el tráfico en el Centro