Japón volverá a cazar ballenas con fines comerciales a partir de julio de 2019, así lo ha hecho saber a la Comisión Ballenera Internacional (CBI), organismo que regula la caza de estos cetáceos. Asimismo, el ministro portavoz nipón, Yoshihide Suga, ha comunicado que abandonan la CBI, según recoge La Información.
Lo cierto es que, pese a que se adscribió a la moratoria internacional que prohibía la caza de esta especie y que entró en vigor en 1985/1986, durante las últimas décadas Japón ha seguido cazando ballenas alegando fines científicos. Los grupos ambientalistas criticaban que este modelo era una forma de caza comercial encubierta. De hecho, es el segundo país que más ejemplares de este animal captura (entre 400 y 500 al año), sólo por detrás de Noruega (600-700) y por delante de Islandia (200).
Ahora, los balleneros japoneses podrán capturar a estos mamíferos en sus aguas territoriales en su zona económica exclusiva.
Las organizaciones ecologistas han mostrado su rechazo al considerar que otras naciones pueden seguir el ejemplo de Japón, dañando la vida marina. "Japón se convierte ahora en una nación ballenera pirata que mata a estos leviatanes del océano completamente fuera de los límites del derecho internacional", afirmó la presidenta de la organización Humane Society, Kitty Block.