Este viernes ha fallecido a los 74 años de edad Rosario Cera Perdomo, quien fuera delegada de Iberojet en Madeira (Portugal) y en Lanzarote, así como una persona muy querida en el sector turístico, sobre todo, de Canarias. “Era una persona con un talento tremendo, con una pasión por lo que hacía tremenda también. Muy equilibrada, la verdad que como delegada hizo muy buen trabajo allí donde estuvo”, dicen de ella los que la conocían tanto personal como laboralmente.

Tal y como explica José Torres, propietario de Viajes Alegranza y miembro de la directiva de la Federación Turística de Lanzarote, Charo —como la conocían— “fue una gran leyenda, ya que empezó muy temprano y tuvo un recorrido muy muy amplio en el sector”. 

Concretamente, su primer contacto con el mundo del turismo fue allá por el año 1973, cuando incursionó en el touroperador español Club de Vacaciones como guía en transfers y excursiones.

Sin embargo, su consolidación en el sector se produjo en el año 1975 con la llegada de Iberojet a Canarias. Desde el aterrizaje de la aerolínea de Barceló en Gran Canaria, Charo trabajó junto al delegado de Iberojet en la isla, Moisés Cova, hasta el año 1981, cuando la proponen como delegada en Madeira. En la isla portuguesa permaneció entre 4 y 5 años, hasta que volvió a Canarias, específicamente a Lanzarote, donde desarrolló el grueso de su carrera.

Por aquellos años, comenzaban a entrar de lleno en Canarias los vuelos chárter, sobre todo, en islas como Lanzarote, con grandes atractivos, pero por aquel entonces, poca conectividad. Y esa es precisamente la gran labor de Charo en su regreso. En la ‘tierra de los volcanes’ fue donde ejerció más años como delegada, hasta su jubilación hace aproximadamente 15 años.