Los bares, discotecas y locales de ocio de Suiza se enfrentan a un importante desafío, y es que se está produciendo un cambio social que ya está comenzando a impactar en su cuenta de resultados.
Según recoge NZZ am Sonntag, el consumo de alcohol entre los más jóvenes estás descendiendo. El último estudio de la Oficina Federal de Estadística (OFE) reveló que más de la mitad de los jóvenes entre 15 a 24 años no bebe alcohol o lo hace menos de una vez a la semana. Esto supone un fuerte golpe para los negocios, para los que la venta de alcohol supone el 60% de los ingresos, en el caso de los clubes nocturnos, y un 85%, en el de los bares.
El portavoz de la Comisión de Bares y Clubes de Zúrich (BCKZH), Alexander Bücheli, ha aseverado al citado medio que la crisis afecta ya a toda Suiza. "Si comparamos los años 2018 y 2023, las ventas por cliente han caído un 40 por ciento", ha aseverado.
Ante la pérdida de ingresos, Bücheli hace un llamamiento a los políticos para que busquen soluciones para “apoyar la cultura nocturna” e incluso pide que se impulsen ayudas y subvenciones para el sector. No obstante, ya son muchas figuras parlamentarias y asociaciones las que se han mostrado contrarias a este llamamiento, considerando un error promover el consumo de alcohol. Exhortan a los locales a que se adapten a este nuevo cambio estructural y lamentan que los bares y discotecas no hayan sabido aprovechar el auge de los productos y eventos sin alcohol.
