Muchas entidades de promoción turística han puesto en los últimos años su vista en un segmento que, hasta el momento, pasaba desapercibido: los nómadas digitales. Se trata de personas que, por las características de su trabajo —eminentemente tecnológico— pueden desempeñar su labor desde cualquier lugar del mundo y que cambian de forma habitual de residencia.

Además del propio gasto que generan ellos mismos, estos remote workers son interesantes, puesto que atraen al destino a compañeros de trabajo, amigos y familiares, ya sea para visitas esporádicas o por recomendación.

Destinos clásicos del ‘sol y playa’ como Cancún, Playa del Carmen y Tulum (México), Tenerife y Gran Canaria (Canarias) o Hawái (EE. UU.) están consiguiendo atraer la atención de estos nómadas que buscan combinar trabajo con naturaleza, vida nocturna y mar. Así lo refrendan los últimos datos de NomadList, comunidad que aglutina a trabajadores remotos de todo el planeta.

Basándose en la información proporcionada por los propios miembros de la comunidad, se comprueba que estos destinos emergentes muestran un crecimiento sostenido durante los últimos 5 años que en este 2021 se ha disparado.
 

Si bien, se trata de destinos emergentes, ya que hay otras localizaciones fuertemente establecidas que también mantienen un crecimiento constante. 
 

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