Que el Fiat 500 ha trascendido el mundo de la industria automotriz y se ha convertido en todo un icono de la cultura popular es un hecho contrastado. Lo que no esperaban muchos turistas que acuden a Miami, uno de los principales destinos de Estados Unidos, es poder darse un paseo náutico a bordo de este pequeño utilitario que representa la Marca Italia.
Y es que este pequeño bote con todo el carácter del emblemático automóvil ha sido idea del empresario Antonio Pietro Maria Galasso, que a través de su empresa Cars Off-Shore se ha encargado de desarrollar esta novedosa y coqueta embarcación, bajo licencia oficial del grupo Fiat, claro.
El primer destino del pequeño Fiat 500 Offshore fue la costa amalfitana, en el mar Adriático. Sin embargo, la ingeniosa idea ha cruzado el charco y ha llegado hasta un puerto deportivo de Miami, donde se alquilan como experiencia turística.
La transformación del icónico vehículo se realiza retirando el techo, para luego modificar los pasos de rueda y sustituir el banco de los asientos traseros por otros dos apropiados para uso náutico, siempre preservando la esencia del automóvil original.
A pesar de estos cambios, el barco conserva los faros, luces traseras y espejos originales del coche, manteniendo así su alma automovilística y está impulsado por un motor fueraborda Mercury de 40 caballos de potencia, con opciones de hasta 115.