Se acercan las vacaciones de Semana Santa y una de las mayores preocupaciones de los padres que viajan con niños es la seguridad de estos en el destino elegido para pasar unos días de relax. Aunque los hoteles cuentan con socorristas para vigilar sus piscinas y las playas turísticas cuentan con amplios destacamentos de salvamento, cada año los medios de comunicación se hacen eco de sucesos que hacen dudar de la preparación de España para prevenir los ahogamientos.
En 2016, 19 menores fallecieron ahogados en piscinas y playas de las costas españolas. Si hablamos de Europa, las cifras han llegado a ascender hasta 5.000 en los últimos diez años. Estos incidentes son la tercera causa de muerte infantil en el mundo, sobre todo en la franja de edad de uno a cuatro años.
¿Se puede evitar?
Aunque la vigilancia extrema es siempre la alternativa más efectiva para evitar la tragedia, algunas empresas han desarrollado dispositivos que permiten disfrutar de las vacaciones con mayor tranquilidad al minimizar los riesgos.
- Pulsera Kingii
Es una pulsera de seguridad que se convierte, en cuestión de segundos, en un flotador de emergencia. Su mecanismo es bastante sencillo, pues solo hay que tirar de una palanca para que el cartucho de CO2 que lleva incorporado se perfore y la bolsa comience a inflarse. Aunque ofrece flotabilidad adicional, la empresa aclara que no puede reemplazar a un chaleco salvavidas por lo que se recomienda la supervisión de un adulto para la protección total del infante.
- Blue Fox STI
Esta pulsera se coloca en la muñeca del bañista y se regula bajo una serie de parámetros de seguridad (profundidad, tiempo sumergido…) a los que se les puede añadir cinco perfiles predeterminados: bebé, niño no nadador, niño nadador, adulto no nadador o adulto nadador.
Cuando se traspasan los límites configurados, el dispositivo emite una señal sonora potente. Además, lleva incorporada una luz LED para que sea más fácil averiguar la localización de la persona en apuros en situaciones de visibilidad baja.
- Brazalete Buddy Guard
Es un sistema bastante parecido a los anteriores. Tiene una base receptora y un brazalete en forma de reloj infantil que emite una señal sonora y una vibración cuando quien la lleva entra en contacto con el agua o se aleja de un radio establecido.
- Pulsera antiahogo BlueProtect para niños
Este dispositivo se coloca en la muñeca de los niños y cuando se cierra solo puede ser retirada por un adulto. Su principal función es la de ayudar en la vigilancia de menores que no saben nadar. Si caen al agua, la pulsera detecta la caída y manda el aviso al dispositivo central que emite una señal de alarma.
Garantías de seguridad
Incluir este tipo de dispositivos entre las prestaciones de los hoteles orientados al alojamientos de familias les da un plus de valor porque garantiza la seguridad de los más pequeños ante cualquier situación que no puedan cubrir los encargados de la vigilancia.
Además, si a esta tecnología le añadimos los nuevos drones salvavidas que muchas playas españolas están empezando a incorporar a sus unidades de salvamento, la nación podría acercarse a la excelencia en materia de seguridad.
En una época en la que la inseguridad del turista, en diversos aspectos, está a la orden del día, ofrecerles tranquilidad en relación con los miembros más importantes de la unidad familiar supone una garantía de recepción de turistas para nuestros destinos. No olvidemos que España es el receptor líder de turismo familiar en Europa con una cuota de mercado del 15%.